Lasaña de setas con bechamel de almendras
Muy buenas!! Hoy vengo con una receta de pasta, una rica lasaña de setas, a la que he querido dar un toque un poco especial con una salsa bechamel de almendras.
En casa nos encanta la cocina italiana, las recetas con pasta son nuestras favoritas. Podríamos comer pasta todos los días y yo creo que no nos cansaríamos. De hecho en el blog ya tengo unas cuantas recetas con pasta, pero recetas de lasaña, creo que solo tengo publicada esta de verduras y soja texturizada, una receta que publiqué hace bastante tiempo. Y esta otra lasaña de calabacín, que aunque no lleva pasta, te la recomiendo, porque está muy rica.
En esta ocasión aprovechando que estamos en otoño, es temporada de setas, y que me encantan! He decidido que el relleno de mi lasaña iba a ser un salteado de setas con cebolla, ajo, y un toque de tomillo.
Utiliza las setas que más te gusten, si tienes oportunidad de ir al campo a recogerlas tú mismo, genial. Yo he comprado una bandeja de setas variadas en el supermercado, porque nunca he ido a recoger setas, y no sabría cuales son aptas para el consumo y cuáles no. Así que mejor no arriesgarse.
Respecto a la salsa bechamel, he de decir que nunca la había preparado con bebida vegetal, en este caso de almendras, y me ha gustado bastante. Así que probaré con otras variedades. Además si sustituyes la mantequilla por aceite tendrás una bechamel vegana.
Vamos ya con la receta!
Primero te dejo el vídeo, por si te apetece ver paso a paso como la he hecho. Después tienes la receta escrita.
Ingredientes para el relleno:
- 1/2 cebolla
- 1 diente de ajo pequeño
- 200 g. de setas variadas
- Aceite, sal y pimienta negra molida
- 1/2 cdta. de tomillo seco
Para la bechamel de almendras:
- 40 g. de mantequilla en dados
- 30 g. de harina
- 1/2 l. de leche de almendras
- Sal y pimienta negra molida
- 6 placas de lasaña precocida
- 50 g. de mezcla de quesos rallados (emmental, gouda, cheddar)
Elaboración:
Comenzamos preparando el relleno de setas.
Pon a calentar una sartén con la base cubierta de aceite de oliva. Cuando esté caliente agrega la cebolla pelada, lavada, y cortada en medias lunas.
Añade también el diente de ajo pelado y bien picadito. Yo siempre quito el germen, el brote que lleva en el interior, y la verdad que me sienta bastante bien. Rehoga unos minutos.
Incorpora las setas bien limpias ( yo las lavo), secas y troceadas. Mezcla y rehoga unos minutos más.
Por último echa sal y pimienta negra molida al gusto. De tomillo seco yo pongo una media cucharadita, pero esto va también en gustos.
Retira del fuego y reserva.
Para la bechamel de almendras comenzamos poniendo a calentar en un cazo la mantequilla. Cuando se haya derretido, agrega la harina y remueve con una varilla hasta que se tueste un poco. No te preocupes si en este momento se hacen muchos grumos, cuando eches la leche se van a ir disolviendo. Y si no consiguieras una salsa lisa y homogénea puedes batirla con la batidora de mano.
Cuando la harina se haya tostado un poco vierte la mitad de la leche de almendras. Es mejor que la leche esté un poco caliente, pero si está fría tampoco pasa nada. Sigue removiendo con varilla y cuando empiece a espesar agregas el resto de la leche.
Remueve hasta que comience a hervir. Echa sal y pimienta negra molida al gusto, y deja un par de minutos más. Retira del fuego.
Si tú también estás utilizando placas de lasaña precocidas, mira las instrucciones en el envase. En el mío pone que hay que poner las placas a remojo en agua caliente durante 10 minutos, removiendo de vez en cuando. Después las he sacado del agua y las he secado con papel de cocina. Y si no tienes o no utilizas las placas de lasaña precocidas, usa las que más te gusten, eso no afecta en nada a la receta :)
El siguiente paso es montar la lasaña. Precalienta el horno a 180 º C, calor arriba y abajo.
Escoge un recipiente apto para horno y cubre la base con una fina capa de bechamel.
Cubre con dos placas de lasaña, una al lado de la otra. Extiende de nuevo una capa de bechamel.
Reparte por encima la mitad de las setas salteadas y coloca encima otras dos placas de lasaña.
Repite los mismos pasos, termina cubriendo con salsa bechamel y espolvorea por encima el queso rallado.
Lleva al horno durante 20-25 minutos. Hasta que el queso se haya fundido y esté dorado.
Consejo: Si utilizas placas precocidas de lasaña, ten la precaución de cubrirlas bien con la salsa, de lo contrario puede que alguna parte quede un poco dura.
Es una receta perfecta para dejar preparada con antelación, y hornear antes de servir.
Espero que te haya gustado mucho!
¡Hasta la próxima receta!
♥ Pilar ♥
Pilar en casa la pasta es casi el pan nuestro de cada día, nos encanta toda, la cocine como la cocine, nadie protesta.
ResponderEliminarTu lasaña tiene que estar riquísima, he probado la leche de Almendras infinidad de veces, porque mi hermana se crió con ella, pero no tengo costumbre de comprarla ahora en casa, si me animo ya te cuento, porque es distinta a la leche de vaca, naturalmente.
Besos
En mi casa pasa lo mismo Concha, como ya he dicho más arriba, podríamos comer pasta todos los días y no nos cansaríamos. De las leches vegetales que tomo la de almendras es una de mis favoritas. Ese saborcito que tiene se nota en la bechamel y le da un toque diferente, para mí muy rico. Si te animas me cuentas. Besos!
EliminarUna vez más, es un placer leerte :)
ResponderEliminarCuánto me alegro!! Muchas gracias por tu comentario! Un saludo!
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