Buñuelos de calabaza y naranja
En otoño y en especial por la festividad de Todos los Santos no pueden faltar los buñuelos de viento. Estas pequeñas bolas de masa frita, a menudo rellenas de chocolate, nata, o cremas diversas son una verdadera delicia.
Ya tengo publicada en el blog una receta de buñuelos de viento rellenos de chocolate, para mí la mejor receta de buñuelos, después de probar varias. Pero me quedaba pendiente hacer buñuelos de calabaza, y esa es la receta que comparto hoy contigo.
Como verás a continuación esta receta de buñuelos de calabaza es muy sencilla y se tarda muy poco tiempo en preparar, sobre todo si tienes cocida la calabaza con antelación. Lo que me parece más importante es coger el punto a la temperatura del aceite. Debe estar caliente pero no en exceso como te explico más abajo en la elaboración. Para echar la masa en el aceite yo utilizo dos cucharas, también se puede hacer con una manga pastelera. Es mágico ver como la masa cae al fondo del cazo, enseguida flota, se hincha y se van formando las bolitas, y hasta se dan la vuelta solas. A veces las bolas no se forman perfectas y sale alguna punta, si es así puedes cortarla con unas tijeras.
Pero lo mejor es que veas el vídeo por si te ha quedado alguna duda 🙂
Ingredientes para 24 unidades aproximadamente:
- 125 g. de calabaza cocida
- 1 huevo
- 75 g. de harina de trigo
- 1/2 cdta. de levadura química
- 15 g. de azúcar
- 1 cdta. de ralladura de naranja
- Azúcar para rebozar los buñuelos después de freír
Elaboración:
Pela, despepita y trocea la calabaza. Hierve en abundante agua durante 20 minutos o hasta que esté bien tierna. Escurre, deja templar y tritura con la batidora de mano para hacerla puré. También puedes aplastarla con un tenedor.
Separa la yema de la clara. Bate con varillas la clara del huevo con una pizca de sal hasta que esté bien firme. Reserva.
En otro bol tamiza la harina junto con la levadura, agrega la yema de huevo, el azúcar, la ralladura de naranja, y el puré de calabaza. Mezcla hasta que tengas una masa homogénea.
Por último incorpora la clara montada en dos veces y con movimientos envolventes.
Calienta un cazo o sartén honda con abundante aceite de oliva o de girasol. El aceite tiene que estar caliente pero no en exceso, pues en ese caso los buñuelos se quemarán por fuera y estarán crudos por dentro.
Echa pequeñas porciones de masa con la ayuda de dos cucharas. Se suelen dar la vuelta ellos solos, pero también puedes hacerlo tú con una espumadera. Espera hasta que estén dorados, sácalos y deja reposar sobre papel absorbente.
Reboza los buñuelos en azúcar, o en una mezcla de azúcar y canela, mejor mientras estén calientes.
Disfruta de esta delicia.
Otoño, temporada de calabaza, de naranjas, y temporada de buñuelos, tienes que probarlos!!
¡Un abrazo!
♥ Pilar ♥
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