Cómo hacer mantequilla clarificada casera | Ghee
Seguramente habrás oído hablar de la mantequilla clarificada o del ghee, o quizás has visto alguna receta en la que se utiliza. Pero por si no la conocías te diré que la mantequilla clarificada no es más que mantequilla a la que hemos retirado los sólidos lácteos y el agua, quedándonos solo con la grasa. Si lo que queremos hacer es ghee, tan solo debemos dejarlo a fuego mínimo durante más tiempo, hasta que los sólidos que caen al fondo del cazo se tuesten un poco y adquieran un tono marrón, esto le dará un sabor más intenso.
Puedes utilizar mantequilla clarificada tanto en recetas dulces como en recetas saladas. Una de las ventajas que tiene la mantequilla clarificada y sobre todo el ghee, es que tiene un punto de humeo muy alto.
El ghee es uno de los pilares de la cocina y medicina ayurvédica, se conoce como oro líquido y se le atribuyen muchos beneficios para la salud, tanto para su consumo como para aplicarlo en la piel. En Francia es muy utilizado en la repostería. Y en otros países también lo utilizan aunque se conozca por otro nombre. Lo cierto es que cada vez es más popular y es fácil encontrarlo en herbolarios y tiendas especializadas, pero cuando veas lo fácil que es de hacer, seguro que te animas a prepararlo en casa.
El único ingrediente que necesitas es mantequilla sin sal de buena calidad, yo he utilizado 250 g., pero puedes hacer la cantidad que quieras porque se conserva perfectamente en un tarro de cristal con tapa durante bastante tiempo. Puedes guardarlo en la nevera o en un armario.
Aunque es un muy sencillo de hacer, a continuación puedes ver todo el proceso en vídeo.
- Poner la mantequilla en un cazo a fuego mínimo y dejar que se funda despacio, no hay que remover.
- Después de unos 20 minutos se habrá formado una capa blanca en la superficie y también habrá sólidos lácteos en el fondo del cazo. Si lo que quieres es mantequilla clarificada, retíralo del fuego y deja reposar durante 15 minutos. Si quieres hacer ghee, déjalo al fuego hasta que se tuesten los sólidos del fondo, y después sigue los mismos pasos que para la mantequilla clarificada.
- Retira con cuidado la capa blanca de la superficie, puedes hacerlo con una cuchara o una espátula.
- Cuela el resto de líquido con un colador fino, mejor si pones una gasa dentro del colador.
- Ponlo en un tarro de cristal y deja enfriar. Cuando se enfría se solidifica de nuevo, tapa y conserva en la nevera o a temperatura ambiente.
Espero que te animes a probar la mantequilla clarificada o el ghee, a mí me ha encantado. La forma más básica de probarlo es untado en una tostada. También lo he usado en alguna receta de repostería, y para hacer salsa holandesa, riquísima.
Un abrazo.
Pilar ♥
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