Bizcocho de turrón

Este bizcocho es ideal para aprovechar los restos de turrón que te hayan quedado después de las fiestas, o para hacerlo porque te encanten los dulces con turrón. 

No sé tú, pero yo cuando terminan las navidades estoy deseando que se acabe el turrón y demás dulces navideños. Y no es porque no me gusten, al contrario, ¡me encantan!, pero después de tantos excesos lo único que me apetece es comer cosas ligeras y más saludables. Si pudiera, me iba una semana a una de estas clínicas que hay para depurar el organismo. 

Pero tampoco me gusta tirar comida, así que siempre suelo hacer alguna receta de aprovechamiento.      

Hace unos días compartía contigo este pudin de roscón de Reyes, y hoy te traigo un bizcocho de turrón riquísimo, ideal para desayunos y meriendas.

Yo lo he hecho con turrón de nata con nueces que me había quedado pero tú puedes hacerlo con cualquier otro. 

Es una receta muy fácil, te dejo el vídeo donde puedes ver como se hace paso a paso y después tienes la receta escrita. 

Ingredientes:

- 4 huevos

- 200 g. de azúcar

- 120 ml. de aceite de girasol

- 300 g. de harina de trigo común

- 1 sobre (16 g.) de levadura química Royal

- 200 ml. de leche

- 130 g. de turrón de nata con nueces o cualquier otro a tu gusto

- Azúcar extra para espolvorear por encima (opcional)

Elaboración

Pon los cuatro huevos en un bol añade el azúcar y mezcla con una varilla manual, puedes utilizar varillas eléctricas pero no es necesario.

Añade el aceite y mezcla de nuevo. Yo utilizo aceite de girasol pero puedes utilizar cualquier otro aceite suave, o aceite de oliva si lo prefieres.

A continuación incorpora la harina tamizada con la levadura, hazlo en dos veces alternando con la leche.

Por último agrega el turrón bien picadito y mezcla para que se reparta por toda la masa.

Forra con papel vegetal un molde rectangular de 30 cm. de largo por 25 cm. de ancho por 7 cm. de alto. Mi molde es no desmontable y para forrarlo simplemente he humedecido el papel y lo he arrugado formando una bola, de esta manera cuando lo estiras se adapta muy fácilmente al molde. 

Vierte la masa en el molde y espolvorea azúcar por encima. Esto es opcional pero hace que se forme una especie de costra en la superficie que a mí me encanta.

Hornea a 180 º C durante 35 minutos o hasta que al pinchar con un palillo salga limpio y seco.

Deja templar, desmolda y deja enfriar por completo sobre una rejilla.

Se conserva muy bien a temperatura ambiente envuelto en film transparente durante 5-6 días, más no le sé porque se ha acabado, y también lo puedes congelar.

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